Amortización Equipo de Radiodiagnóstico
Antes de plantearnos la compra de un equipo radiológico digital o actualizar nuestro equipo de rayos convencional a un sistema digital directo, conviene recapacitar y hacer números para saber si nuestra clínica es capaz de amortizarlo y si es así, en cuanto tiempo lo va a hacer.
Lo primero que debemos hacer es pensar si queremos cobrar el servicio en “estudios radiológicos” o en número de radiografías. Hace unos años, la tendencia era cobrar X euros por la primera radiografía, un poco menos la segunda y así sucesivamente. Esto se puede seguir haciendo, pero el cliente necesita saber de antemano cuanto va a costarle el servicio y a priori, en bastantes ocasiones, el veterinario no sabe si le va a bastar con una, dos, tres… radiografías para poder diagnosticar. Ahora mismo, lo que se tiende es a cobrar estudios radiológicos y tener 2, 3 o 4 tarifas distintas, dependiendo de la patología a estudiar; Por ejemplo, un conteo de fetos en una gestación que necesita una radiografía lateral de abdomen sería la “tarifa 1”, un prequirúrgico con 3 radiografías torácicas (2 laterales y una ventrodorsal) sería la “tarifa 2”, una displasia oficial (que en algunos casos conlleva varias pruebas y quizás una sedación) sería la “tarifa 3”, una caída con posible politraumatismo la “tarifa 4” y así sucesivamente.
Con lo anterior ya definido y con las estimaciones mensuales de media calculadas de forma pesimista y de forma optimista, lo siguiente es saber en una amortización a 5 años, donde ya hemos añadido los intereses bancarios, en qué cantidad de dinero de inversión nos podemos meter. En la siguiente gráfica, se muestran en el eje de ordenadas (vertical) la inversión en euros de nuestro
equipo (desde 12.000€ hasta 26.000€) y en el eje de abscisas (horizontal), el número de radiografías mensuales que se han de hacer para pagar un préstamo (incluido los intereses bancarios) Se incluyen 8 tarifas, desde 30€ hasta 80€ que es lo que se cobraría al propietario por el servicio.
Así, por ejemplo, si se cobrase de media 50€ por estudio, una inversión de 12.000€, tendría que facturar 5 estudios mensuales (poco más de 1 estudio semanal) para poder pagar el préstamo, y si la inversión fuera de 24.000€ tendría que cobrar al menos 10 estudios de 50€ de media (o lo que es lo mismo 2 semanales de media). Esos números son solo para pagar los 5 primeros años de amortización, a partir de esa fecha, o todas las radiografías que superen el número de radiografías mensuales para amortizar el equipo los primeros 5 años, es beneficio puro para la clínica.
Que costes no hemos incluido en este estudio:
- Por legislación, tenemos que disponer de un servicio de protección radiológica (inscripción en el registro y controles de calidad anuales) y un servicio de dosimetría personal. Normalmente, estos servicios cuestan unos 300€/anuales + IVA. Es decir, que cada año tendremos que destinar la facturación de X estudios, dependiendo de a cuanto lo cobremos para abonar estos dos contratos.
- El IVA de la inversión, como esta gráfica está pensado para abonar el equipo en una financiación tipo leasing a 5 años, la entidad bancaria nos emitirá una factura mensual donde se incluirá el IVA, y que seguro podemos compensarla con el IVA trimestral sin ningún problema. En el caso de pagar el equipo sin financiación, el IVA total de la operación es más o menos los intereses bancarios, con lo cual la gráfica no se vería alterada, y por lo tanto se necesitarían la misma cantidad de estudios cobrados para amortizar la inversión.
- Las posibles averías y servicios posventa del equipo. Aquí es donde se manifiesta la importancia de comprar un buen equipo a un proveedor con solvencia. En el mercado empiezan a aflorar equipos de procedencia China o proveedores sin mucha experiencia técnica, que ofrecen equipos un 5-10% más económicos. Pero mirando la gráfica, un equipo de 22.000€ y otro de 24.000€, cobrando una media de 50€ por estudio, necesita en ambos casos 9 estudios mensuales para amortizarlo (8’61 estudios mensuales el primero y 9’39 el segundo, para ser exactos) es decir que en la práctica, el ahorro de un 10% no va a repercutir ni en la mortización ni en el beneficio de nuestro servicio. Sin embargo, quizás con el más económico tengamos problemas de facturas de averías, mala o peor calidad de imagen que hace que no realicemos tantas radiografías, fallos intermitentes que nos paralizan el servicio, etc.
¿Y si ya tenemos un servicio radiológico? ¿Por qué renovarlo?
Vamos a suponer que, en nuestro centro, disponemos de un equipo de rayos X “fiable” con menos de 12-14 años de antigüedad, pero que revelamos con un Amortización Equipo de Radiodiagnóstico sistema indirecto o quizás aún con cuarto oscuro (que ya está prohibido para aplicaciones sanitarias). ¿Podemos mantener nuestro equipo de RayosX? ¿Qué ventajas tiene pasar a un sistema directo de calidad médica?
- No tiene fungibles ni piezas de desgaste. Con lo que el ahorro anual prorrateado puede estar entre 300€ y 600€ (rodillos, cartulinas, chasis, lámparas de borrado, soporte informático, etc.)
- La calidad de imagen es muy superior, con lo que potenciamos el servicio y por lo tanto aumentamos la facturación anual en más de un 20% (más animales radiografiados).
- La ergonomía de trabajo es perfecta, esto es, que podemos hacer una radiografía cada 2 segundos (en los equipos de alta gama) con lo que, una vez tumbado el animal en la mesa en menos de 30 segundos, podemos realizarle 3 radiografías en 3 posiciones distintas, lo que implica, además de la seguridad diagnóstica, un aumento de facturación en más de un 20% (más radiografías a un mismo animal).
- Aumento de calidad, implica un aumento en nuestras tarifas por estudio radiográfico, y el propietario lo entiende y no ve mal un aumento de un 10% en nuestras tarifas.
Aplicando lo anterior, en la siguiente gráfica se muestra el incremento de facturación mensual de nuestra nueva instalación. Se muestra una clínica que hace un estudio radiográfico semanal (4 mensuales) hasta otra que hace uno diario (24 mensuales) y con diferentes precios actuales de facturación por estudio, desde 30€ hasta 80€ por estudio.
De esta manera, por ejemplo, una clínica que hace 8 estudios mensuales (2 semanales) cobrando 50€ por estudio, pasaría a facturar en las previsiones estadísticas unos 285€ extra al mes, es decir, que podría pagar la cuota mensual de un digitalizador de 14.500€ a 5 años de financiación sólo, con el extra de facturación mensual; lo que significa, que en este ejemplo el digitalizador no
repercute en el detrimento del beneficio de la clínica.
¿Y si mi equipo radiológico no es fiable o tiene más de 15-18 años? ¿Debocambiar toda la instalación?
Si el sistema digital directo que vamos a adquirir tiene calidad médica podemos estirar nuestro equipo radiológico hasta que tengamos una avería seria, ya que más del 90% de la calidad de la imagen tiene que ver solo con la calidad del sistema digital.
Para saber si lo tenemos que cambiar hay que ver:
- Nuestro equipo de Rayos X no pasa los controles de calidad por la UTPR, con lo que depende cuales sean las anomalías y la calidad y antigüedad del equipo, quizás no merezca la pena la reparación.
- Tiene una avería intermitente irreparable económicamente.
- Hay que trasladar el equipo, pero el equipo no cumple los requisitos legales actuales para su nueva modificación en el registro de instalaciones de la comunidad autónoma.
- Simplemente, pensamos que no le queda mucho tiempo útil y merece la pena el descuento por compra conjunta. El precio de un detector digital oscila entre 12.000€ y 15.000€ en el mercado, el de un equipo de RayosX entre 11.500€ y 13.500€ y un conjunto completo entre 22.000€ y 25.000€ con lo que comprando el conjunto nos ahorramos entre 1.500€ y 3.500€, así que podemos contemplar la idea de hacer la inversión completa ahora en lugar de la mitad ahora y la otra mitad cuando el equipo de RayosX
muera.